Impulsada por el deseo implacable de optimizar las capacidades de cualquier tema para transmitir una historia, Isabelle de Joantho aborda cada uno de sus temas en múltiples ocasiones. Los enfoques figurativos y escultóricos se mezclan con el arte abstracto. La obra se construye poco a poco y se convierte en una historia donde siempre se evoca el tiempo.

 

En sus pinturas se mezclan las palabras de escritos esbozados, huellas del tiempo, manchas accidentales de materiales y muchas otras cosas. Las dudas, las líneas imperfectas del carboncillo y las correcciones desafían, enriquecen, a veces conmueven. Cada lienzo expresa un recuerdo, un sentimiento momentáneo y fugaz que ofrece al artista la posibilidad de reconectar el hilo, reconstruir las piezas de un rompecabezas, de una historia. El ejercicio no es de ninguna manera un trabajo de introspección. Solo busca penetrar superficialmente una memoria incompleta y fragmentaria que retiene lo esencial para entregar solo fragmentos, pistas a veces ricas en significado para quienes pueden darles algunas.

 

En sus esculturas es tanto el retorno a las fuentes como el mundo moderno los que se evocan a través de una puesta en escena siempre sencilla. Bronce para el personaje. Madera, acero y materiales para el medio ambiente. ¿Abstracto o figurativo? Poco importa. La mano de obra de Isabelle de Joantho es fácilmente identificable por la sobriedad de su paleta, los frecuentes desbordes del marco y el trabajo de relieve. En sus pinturas se mezclan las palabras de escritos esbozados, huellas del tiempo, manchas accidentales de materiales y muchas otras cosas. Las dudas, las líneas imperfectas del carboncillo y las correcciones desafían, enriquecen, a veces conmueven.

 

Cada lienzo expresa un recuerdo, un sentimiento momentáneo y fugaz que ofrece al artista la posibilidad de reconectar el hilo, reconstituyendo las piezas de un rompecabezas, de una historia. El ejercicio no es de ninguna manera un trabajo de introspección. Solo busca penetrar superficialmente una memoria incompleta y fragmentaria que retiene lo esencial para entregar solo fragmentos, pistas a veces ricas en significado para quienes pueden darles algunas.

 

En sus esculturas, es a la vez un retorno a lo básico y al mundo moderno que se evocan a través de una puesta en escena siempre sencilla. Bronce para el personaje. Madera, acero y materiales para el medio ambiente. ¿Abstracto o figurativo? No importa. La mano de obra de Isabelle de Joantho es fácilmente identificable por la sobriedad de su paleta, los frecuentes desbordes del marco y el trabajo de relieve.